sábado, 19 de marzo de 2016

Pastelería - Recomiendo Efusivamente: Vanity Cakes



Vanity Cakes
Praza da Soidade, 12
tel: 982 98 52 28 web: fb.com/VanityCakesLugo

Horario: Lun-Sab 9:00-14:00 y 16:00-21:00

Precio: €
 

Visitado el 8 de marzo de 2016

La semana pasada por fin tuve algo de tiempo para salir de casa y tomar algo. Tras días y días encerrado en casa, me apetecía salir y comer cosas dulces hasta reventar. Quedé con una amiga a la que le gustan los dulces tanto como a mi y decidimos ir a tomar una merienda de pasteles en Vanity Cakes.

Debió de ser una de las primeras pastelerías de Lugo en ofrecer pasteles un poco más ‘internacionales’ porque me acuerdo que cuando abrieron hace unos años, todo el mundo estaba loco por los cupcakes que servían. A mí, sin embargo, no me suelen gustar los cupcakes y por eso no entré hasta hace poco. Grave error por mi parte.

El interior del local está muy cuidado, acorde con el nombre “Vanity” es como entrar a una cafetería francesa romántica, de tonos claros y todo luminoso y pulcro. Es un local pequeñito, ya que solo hay unas cuatro o cinco mesas y a la izquierda puedes ver en el mostrador todos los tipos diferentes de pasteles que ofrecen.

Puedes tomar las tartas en el local o pedir para llevar

Al ver las tartas tan bonitas y enteras en la nevera pensé que no se podrían pedir las que estaban sin empezar, que serían de encargo o algo por el estilo y por poco no me pedí una. Menos mal que al explicarnos de qué era cada cosa nos dijeron que podíamos escoger de las tartas que quisiéramos. Cada ración de tarta cuesta 2,30€ y entre las opciones que había el día que fuimos había: Tarta de zanahoria, pastel de manzana, tarta de fresa y tarta de piña y coco entre otros.

Pedimos las tartas y bebidas y esperamos un poco mientras lo preparaban todo. Lo que nos sirvieron no me lo esperaba: Unos trozos enormes de tarta.

No es exageración decir que esta tarta ha cambiado mi vida (2,30€)


Yo creo que gracias a esta tarta no puedo decir más las tonterías que soltaba de vez en cuando de que si los bizcochos no me apasionan que si no se cuanto. En serio. Ha cambiado mi opinión completamente.

El bizcocho en sí es increíblemente ligero, la nata que lo cubre como una nube dulce y la mermelada de fresas ácida con un sabor a fresas súper intenso. Tomar un bocado de todo eso a la vez te hace sentir como si estuvieras levitando. Increíble.

Tras haber probado la tarta de mi acompañante pensé que qué pena que yo no me hubiera pedido un bizcocho también, ya que yo opté por un trozo gigantesco de pastel de manzana.

Como un "Apple Pie" americano pero cien veces mejor (2,30€)


La pena no me duró mucho ya que según me metí el primer trozo de pastel en la boca me transporté a un lugar feliz y agradable.
La tarta, que parecía pesada a primera vista, es increíblemente ligera. Con trozos de manzana y nueces, y una cobertura de hojaldre, es genial para acompañar el té con leche y el cappuccino (2€) que nos pedimos.

Siempre da pena revolverlos y destrozar las bandas (2€)


Lo mejor de todo es que las dos tartas aunque son dulces, no son para nada empalagosas y incluso siendo tan grandes, no acabas lleno de que no puedes más. De hecho, cuando volví a casa me arrepentí de no haber cogido un trozo más de tarta para llevar (de la de piña y coco) y ahora estoy buscando otra oportunidad para salir a probar los otros sabores. Incluso me he animado a probar los cupcakes, a ver si están tan buenos como el resto de las cosas. Una cosa está clara: TENGO que volver.

No hay comentarios:

Publicar un comentario